Fariña

Me he leído este libro que me recomendó un amigo del circo y que salió de oferta en el kindle flash. El libro es una crónica del contrabando en Galicia desde la posguerra hasta la actualidad.

Narra historias, describe a los contrabandistas y narcos, las mayores operaciones policiales y judiciales, las madres que lucharon por erradicar la droga y la impundad...

Es un buen libro que se lee de manera muy sencilla y que te permite adentrarte en ese mundo y ver hasta qué punto el narcotráfico estaba y está metido en todos los aspectos de la vida gallega.

Impacta oir hablar de miles y miles de kilos de drogas que se descargan y distribuye a través de Galicia.

También ver la cantidad de vidas que ha destrozado y la lucha de las madres para encarcelar a los responsables de haber destrozado la vida a tanta gente.

Como no todo puede ser bueno hay varias cosas que me han chirriado y que, a pesar de reconocer que el libro está bien, no puedo dejar de resaltar:
  1. No me gusta que utilice todos los nombres de los lugares en gallego. Para mí siempre ha sido Arosa, La Toja o La Coruña. Es más, son sus nombres en español. Igual de exaltado me pongo cuando oigo hablar de Beijing o de Myanmar. Me parece estupendo que el nombre oficial sea A Toxa, pero también lo es Stockholm y decimos Estocolmo.
  2. Tampoco me ha gustado el aire de admiración que demuestra a los narcotraficantes como hombres intrépidos y justos. Puede que pusieran su vida en juego, pero de ahí a aventureros tipo Indiana Jones atravesando la ría a toda velocidad... pues no.
  3. Y, por último, tampoco me parece de recibo la adoración al juez Garzón que, recordémoslo, echó a perder gran parte de la investigación policial por hacerse fotos bajando en helicóptero en el pazo de Laureano Oubiña y que consiguió que prácticamente todos los acusados en la operación Nécora salieran absueltos. No es de recibo decir que actuó bien.
 Como ya he dicho es un libro que se lee muy bien y que da una visión de conjunto sobre el narcotráfico gallego y sus socios. Os lo recomiendo si os interesa el tema y si sois menos puntillosos que yo respecto a lo que no me ha gustado.

Comentarios

  1. Los tres puntos echan para atrás. Mucho. ¡Casi casi son como un stop!

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  2. Jajaja. Sí, pero también tiene su lado positivo. Son unas historias tremendas.

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  3. Hola.
    Hace muy poco yo también reseñaba este libro, y coincido en buena parte con tu crítica. Para mí, siendo gallega, fue todo un impacto descubrir los entresijos de la droga, la historia de cómo comenzó todo, pero especialmente me dejó huella ese capítulo de la generación perdida y las madres que se concentraron en el Pazo de Baión para plantar cara a Oubiña.
    Creo que tienes razón en cuanto a lo del juez, pues no había pensado en que no todo lo que hizo fue digno de admiración.
    No obstante, no estoy de acuerdo en el tema de los nombres. Entiendo que si no eres gallego prefieras decir "La Coruña" o "La Toja", pero hay que tener en cuenta que el autor es de Galicia, y como tal, aunque hable en español, utiliza los nombres en gallego que es la forma oficial. Supongo que como haría un sueco, que pronunciaría el nombre de la capital en su lengua materna.
    Un saludo.

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  4. Gracias, Mrs. Sofía. Yo entiendo y respeto que cada uno lo diga como a él le es natural. Yo digo que a mí me resulta extraño oirlo así. No porque esté mal dicho, sino porque en el contexto de la narración en español me hacía notar algo raro.
    Que el autor está acostumbrado a ello lo entiendo. El que yo como lector me resulte menos raro el término en español creo que también es normal.

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