¿Qué estás mirando?
Me he leído durante el verano este libro sobre la historia del arte moderno. Desde los inicios del impresionismo hasta nuestros días.
Me lo he leído en digital y en la tablet. Y esto es así porque me ha venido muy bien tener la tablet y a la vez que se habla de las obras en el libro poder buscarlas en Google.
No voy a ponerme místico y hablaros de arte moderno. Mi opinión creo que es sabida por todos: el arte actual es una mierda. O más bien, no me puede gustar un arte en el que una mierda puede ser arte.
El señor que escribe esto fue director de la Tate Modern en Londres que es uno de los templos del mal gusto de lo que llamamos arte moderno, así que él defiende su libro y su manera de ganarse el pan.
Tengo que decir que puede que yo sea un reaccionario y que sea como las personas que en siglos pasados rechazaron a otros movimientos artísticos que ahora nos encantan como el impresionismo, por ejemplo. Pero ese argumento no acabo de comprarlo. Creo que el problema es que el arte moderno es malo objetivamente y que se justifica a posteriori. Se habla de qué habrá querido expresar el artista, que qué nos quiere transmitir, que si eso que vemos en esa mancha es una foca o una alegoría de la madre violada del artista... en fin, cosas por las que no paso. Igual que tampoco paso por que el arte es eso que nos hace mirar hacia dentro de nosotros y encontrar la verdad en nuestro interior.
El arte son sentimientos, eso es una gran verdad. El arte provoca sensaciones, también es verdad. Pero yo creo que hay un punto que, para mí define el arte de manera más concisa: el arte es algo que te provoca sensaciones que te alegras de haber tenido, que te hace elevarte y mirar cara a cara a la trascendencia.
Ahí no entro en si uno mira a la trascendencia viendo una ópera o leyendo un cómic, viendo un cuadro de Goya o de Vermeer, a la sombra del Partenón o entre los versos de un libro. Hay una parte personal.
Sí estoy bastante de acuerdo con lo que se cuenta en este vídeo que lleva el bonito título de ¿por qué el arte moderno es tan malo?
Y, bueno, podría ponerme a dar ejemplos. En el libro desde luego hay horrores que harían salir corriendo al más pintado. Yo aborrecía a Picasso, pero ahora no me parece tan malo visto lo que vino después.
Os voy a poner, como ejemplo, la descripción que da este señor de una obra de Damien Hirch llamada hace mil años. Os pongo primero la obra:
Una de las cosas que no me han gustado, pero que aprecio, es el esfuerzo de hilar toda la historia del arte como si un movimiento fuera consecuencia de otro y, esto es lo que no me gusta, no pudiera haber sido de otra manera. Por ahí no paso. Presenta una narración de la historia del arte como si no pudiéramos haber acabado en otro sitio y que estamos en la cima de la creación artística de todos los tiempos.
Os voy a poner, como ejemplo, la descripción que da este señor de una obra de Damien Hirch llamada hace mil años. Os pongo primero la obra:
"una obra brillantemente concebida y soberbiamente ejecutada que no solo lograba ser macabra, sino también, y al mismo tiempo, ser una afirmación de la vida. Dicha obra consiste en una gran estructura rectangular de cristal que mide aproximadamente cuatro metros de largo por dos de alto y dos de ancho, rodeada por un marco de acero oscuro. En el centro de la cabina, a modo de panel divisorio, hay una pared de cristal con cuatro agujeros circulares del tamaño de un puño. En uno de los dos compartimentos hay un cubo blanco hecho de placas de tableros de fibra de densidad media, como una especie de dado gigante, cuyos lados están marcados con un punto negro central. En el centro del suelo del otro compartimento se encuentra la cabeza putrefacta de una vaca muerta sobre la que pende un insectocutor, ese aparato eléctrico con luz ultravioleta que se ve en bares y carnicerías y que sirve para abrasar insectos. En dos de los lados de este compartimento de cristal hay unos cuencos que contienen azúcar. Para completar la obra, Hirst ha incorporado moscas y gusanos. El resultado final es una especie de clase de biología en la que se nos muestra el ciclo de la vida: la mosca pone huevos en la cabeza de la vaca y los huevos se convierten en gusanos que se alimentan de la carne putrefacta de la cabeza de la vaca antes de convertirse en moscas; estas se alimentan de azúcar, se reproducen con otras moscas, ponen huevos en la cabeza de la vaca y mueren al entrar en contacto con el insectocutor (que asume el papel de una especie de Dios imparcial); una vez muertas, caen sobre la cabeza de la vaca y se mezclan con la carne en una especie de materia orgánica putrefacta que sirve de alimento a la siguiente generación de gusanos. ¿Espantoso? Sí. ¿Bueno? Muy bueno. ¿Arte? Por supuesto".
Yo con esto no puedo. Si esto es el arte, conmigo que no cuenten.
En el Pompidou de Málaga hay un tío, que ni me acuerdo como se llama (no falta) que expone pajaritos (de verdad) muertos vestidos con ropita de crochet, montados en bicicletas...
ResponderEliminarPor otro lado, un Miró. Bueno,son tres. Tres lienzos grandes blancos uno con una manchita negra de pintura. Otro con dos manchitas y Un rayón y el tercero más de lo mismo. Una auténtica tomadura de pelo.
Estoy contigo.
Un espanto.
Phaskyy
Phaskyy, sólo de oírlo se me pone mal cuerpo. El arte moderno que triunfa es horroroso en muchos casos.
ResponderEliminar