3D, no gracias
Ya estoy de vacaciones. Sé que muchos me odiáis por ello, pero alguien también sentirá alegría porque esté disfrutando de mi muy merecido descanso. Esta tarde voy a ir con J al cine a ver Cars 2 y el viernes fuimos Anniehall y yo a ver la última de Harry Potter. La vimos en 3D. Es la tercera película que veo en 3D y creo que también va a ser la última.
No le veo ninguna ventaja. Y ninguna es ninguna. Para empezar, yo llevo gafas y ponerme gafas sobre gafas es un engorro tremendo. Las gafas 3D terminan aplastándote las otras gafas contra el ojo. Es muy difícil adaptar las dos y cada vez que te mueves o te rascas es volver a encontrar la postura. Entiendo que éste es un problema que solo afecta a una porción de espectadores, pero yo soy de esa porción: los gafotas.
Otro problema que le veo es que como las dimensiones de la pantalla son limitadas, cuando hay un efecto espectacular, cuando parece que algo va a salir de la pantalla, te da cierta impresión, pero al momento desaparece cuando se corta con los bordes, lo que hace que me distraiga y no preste atención. Es un momento, pero pienso: eh, aquí pasa algo raro! y me desengancho, que, además, suele ser en los momentos culminantes. Nuevamente puede que yo sea el raro, no lo dudo, pero a mí me pasa eso.
Seguimos. Cuando estás viendo las cosas en 3D y apartas la mirada del sitio donde se supone que debes estar mirando, lo ves desenfocado con lo que nuevamente se pierde la magia. También pasará en las normales, pero yo eso no lo noto, o a lo mejor es que en esas no miro más que a donde se supone que hay que mirar. Es algo que he notado y que no me gusta.
Pero la razón fundamental es que no hace falta. Si la película te engancha y estás metido, tú lo ves como si fuera real, no necesitas 3D. Te llevas sustos, alegrías, tristezas por lo que te enganchas y te interesa la historia, no por las tres dimensiones. Si estás metido dentro, lo estás viviendo y no te hacen falta gafas. Es la magia del cine.
Hay otras razones como el precio, que por supuesto que influyen. Además, hay muchas partes en las que no hay 3D. Te quitas las gafas y lo ves exactamente igual. Supongo que será por ahorro de costes, pero a mí no me aportan nada y más bien me quitan. He visto en 3D Avatar, Transformers 3 y Harry Potter y las reliquias de la muerte 2 y creo que he cumplido mi cupo. Ah, sí! También vi Up, pero solo media película porque a C le dieron miedo los perros y tuvimos que salirnos. Tal vez las películas de dibujos sean las más adecuadas para apreciar el 3D, pero a los niños no les gusta nada lo de las gafas. Son listos.
En fin, que voy a añadir el 3D a otras cosas a las que no encuentro el mínimo interés como facebook o, más recientemente, google+. Que me pierdo cosas, seguro, que no me importa perdérmelas, más seguro aún!
No le veo ninguna ventaja. Y ninguna es ninguna. Para empezar, yo llevo gafas y ponerme gafas sobre gafas es un engorro tremendo. Las gafas 3D terminan aplastándote las otras gafas contra el ojo. Es muy difícil adaptar las dos y cada vez que te mueves o te rascas es volver a encontrar la postura. Entiendo que éste es un problema que solo afecta a una porción de espectadores, pero yo soy de esa porción: los gafotas.
Otro problema que le veo es que como las dimensiones de la pantalla son limitadas, cuando hay un efecto espectacular, cuando parece que algo va a salir de la pantalla, te da cierta impresión, pero al momento desaparece cuando se corta con los bordes, lo que hace que me distraiga y no preste atención. Es un momento, pero pienso: eh, aquí pasa algo raro! y me desengancho, que, además, suele ser en los momentos culminantes. Nuevamente puede que yo sea el raro, no lo dudo, pero a mí me pasa eso.
Seguimos. Cuando estás viendo las cosas en 3D y apartas la mirada del sitio donde se supone que debes estar mirando, lo ves desenfocado con lo que nuevamente se pierde la magia. También pasará en las normales, pero yo eso no lo noto, o a lo mejor es que en esas no miro más que a donde se supone que hay que mirar. Es algo que he notado y que no me gusta.
Pero la razón fundamental es que no hace falta. Si la película te engancha y estás metido, tú lo ves como si fuera real, no necesitas 3D. Te llevas sustos, alegrías, tristezas por lo que te enganchas y te interesa la historia, no por las tres dimensiones. Si estás metido dentro, lo estás viviendo y no te hacen falta gafas. Es la magia del cine.
Hay otras razones como el precio, que por supuesto que influyen. Además, hay muchas partes en las que no hay 3D. Te quitas las gafas y lo ves exactamente igual. Supongo que será por ahorro de costes, pero a mí no me aportan nada y más bien me quitan. He visto en 3D Avatar, Transformers 3 y Harry Potter y las reliquias de la muerte 2 y creo que he cumplido mi cupo. Ah, sí! También vi Up, pero solo media película porque a C le dieron miedo los perros y tuvimos que salirnos. Tal vez las películas de dibujos sean las más adecuadas para apreciar el 3D, pero a los niños no les gusta nada lo de las gafas. Son listos.
En fin, que voy a añadir el 3D a otras cosas a las que no encuentro el mínimo interés como facebook o, más recientemente, google+. Que me pierdo cosas, seguro, que no me importa perdérmelas, más seguro aún!
Cuqui!!
ResponderEliminarYo también odio el 3D, aunque creo que sólo he visto dos pelis
Up, que creo que podría haberla visto perfectamente sin 3D, vamos, en casa la he visto luego otras dos veces y no he echado de menos para nada el 3D
Avatar, que bueno, vale, puede tener alguna justificación, pero no me compensa especialmente, me resulta incómodo lo de las gafas.
En un mundo en el que la gente se gasta dinero en operarse para no llevar gafas, luego pagamos un extra para ver pelis con gafas, se me escapa.
Te odio mucho, hombre vacacional, pero ya volverás, y me iré yo, bwahahaha.
Seguimiento
ResponderEliminarTotalmente de acuerdo. Yo ya lo tuve claro con Avatar.
ResponderEliminarCosas de la vida, lo que no te va se afianza y lo que te compraste con tanta ilusión lo abandonan. SONY anunció hace poco que dejará de fabricar minidisc (sí, yo también pensaba que lo dejaron hace años, pues no).
Yo he visto Avatar, Alicia en el país de las maravillas y Thor y la única que pudo merecer algo la pena fue la de Alicia... no se si la sala estaba mejor preparada o qué, pero en el resto no es que el 3D se notara especialmente y desde luego era del todo prescindible. Estoy contigo, si la peli te engancha sobran esos efectos (y con lo de las gafas también, jeje). Lo malo es que ahora como está de moda nos lo vamos a tener que tragar sí o sí, como con Harry Potter, que espero ver esta semana aunque sea en 3D!
ResponderEliminarMe alegra ver que no soy el único raruno, porque estaba un poco pensando que es que ya era viejo para estas cosas (que puede que también, eh?)
ResponderEliminarSaludos desde la espera en la peluquería!