Los de Nueva York nacen donde quieren
Ya estoy de vuelta de mi viaje relámpago a Birmingham y prefiero no contar nada porque me voy a calentar. Fui objeto de una redada premeditada para echarme la bulla por el estado del proyecto en el que nos ha mentido el... jefe del proyecto, así que no me apetece mucho hablar sobre ello.
Voy a hablar de mis dos últimas lecturas que han sido The Memory Chalet de Tony Judt y Bossypants de Tina Fey. Los dos los he leído en el kindle y los dos en inglés. Siguiendo con las analogías, éstas ya un tanto absurdas, ambos son neoyorquinos, pero nacidos en otra parte. Uno en Londres y otra en Pensylvannia.
La verdad es que a lo mejor no es muy buena idea hablar de estos dos libros juntos, pero se me ha ocurrido, así que a ver qué sale.
El libro de Judt lo leí porque lo recomendó molinos aquí. Me costó bastante encontralo por procedimientos no comerciales, la verdad. De Judt ya me había leído Postwar, un libro que me gustó bastante. Este es diferente, no es un libro de historia. Son sus memorias y reflexiones. Es entretenidísimo de leer, escribe maravillosamente. Tal vez demasiado maravillosamente porque ha sido bastante difícil leerlo en inglés. Es de notar que tiene bastante sentido del humor, lo que en su situación no debió de ser fácil. Os lo recomiendo fervientemente, si lo queréis yo os lo paso, aunque hace falta saber inglés.
Os pongo unos fragmentos (perdón por la traducción porque es mía):
"Las noches poco productivas son frustrantes físicamente. Claro, puedes decirte a ti mismo, vamos: deberías estar orgulloso del hecho de que sigas cuerdo -¿dónde está escrito que tu debas ser, además, productivo? Y, a pesar de ello, siento cierta culpa por haber sucumbido al destino con facilidad. ¿Quién podría haberlo hecho mejor dadas las circunstancias? La respuesta, por supuesto, es un yo mejor y es sorprendente cuán a menudo deseamos ser una versión mejor de lo que somos- sabiendo perfectamente la enorme dificultad de haber llegado hasta aquí" (Me acabo de dar cuenta de que molinos había puesto la misma cita... me podía haber ahorrado traducirla)
Podría pensarse el mal gusto de considerar afortunado a un hombre sano con una familia joven derribado a la edad de sesenta años por una enfermedad degenerativa incurable de la que en breve morirá. Pero hay más de un tipo de suerte. Caer presa de una enfermedad neurodegenerativa es seguramente por haber ofendido a los dioses en algún momento, y no hay nada más que decir. Pero si tienes que sufrir así, mejor tener una cabeza bien amueblada: llena de piezas útiles que sean multifuncionales y reciclables, a disposición de una mente analítica.
No creo que haya apreciado hasta hace poco la influencia de esos primeros años de infancia en su totalidad. Mirando hacia atrás con la ventaja de nuestra posición actual, uno ve con claridad las virtudes de esa época de escasez. Nadie celebraría su vuelta. Pero la austeridad no era solo una condición económica: aspiraba a ser una ética común. Clement Atlee, el primer ministro laborista entre 1945 y 1951, emergió -como Harry Truman- de detrás de las sombras de un líder carismático del tiempo de guerra y personalizó las escasas expectativas de la época. Churchill despectivamente lo describió como un hombre modesto que tiene mucho por lo que ser modesto.
La rectitud moral en la vida pública es como la pornografía: difícil de definir, pero cuando la ves la reconoces. Describe una coherencia entre intención y acción, una ética de la responsabilidad política. Toda la política es el arte de lo posible. Pero el arte también tiene su ética.
Refiriéndose a las habilidades cocineras de su madre dice: "ella hacía lo que cualquier otra cocinera en Inglaterra en esos tiempos: lo hervía todo hasta matarlo. Tan así era que llegué a asociar la comida inglesa no tanto con la ausencia de sutileza como con la ausencia de cualquier tipo de sabor."
Quizás la consecuencia más desesperanzadora de mi enfermedad -más deprimente incluso que sus manifestaciones cotidianas- es la certeza de que nunca volveré a montar en tren. Este conocimiento pesa sobre mí como una manta de plomo, presionándome más y más dentro de ese pensamiento de un moribundo que marca a la auténtica enfermedad terminal: el entender que hay cosas que nunca voverán. Esta ausencia is más que solo la pérdida de placer, la pérdida de libertad, mucho menos la ausencia de nuevas experiencias.
Bueno, la verdad es que tengo muchísimas más citas apuntadas, pero lo que debéis hacer es leerlo.
El otro libro es mucho más divertido, pero no por ello menos interesante. Es de Tina Fey, la creadora de 30 Rock. No sé si habéis visto la serie o no, pero a nosotros nos parece divertidísima. El libro es una especie de batiburrillo entre sus memorias, consejos, respuesta a preguntas de gente de internet...
El libro me lo leí casi en su totalidad ayer entre aviones y aeropuertos y te hace reir. Nuevamente está el problema del inglés y de las referencias que hace porque muchas para mí son totalmente ininteligibles, pero hay otras con las que me he reído mucho. Voy a intentar traducir algunas, pero el humor es bastante jodido al respecto. Si no os hace gracia, es culpa mía.
Aún sin llegar a tener tres años (su hija), sabe que el pelo rubio es el rey. Y, admitámoslo, el pelo rubio tiene poderes mágicos. Podrías ponerle una peluca rubia a un calentador de agua y algún tío intentaría follárselo.
Aun siento afecto hacia los miembros de BlueCo (una compañía de teatro) como si hubiéramos peleado juntos en el ejército. Específicamente en el ejército francés, porque éramos vagos y con tendencia al escaqueo.
El peine eléctrico era un cepillo pequeño, vibrante y ruidoso que por alguna razón mi familia guardaba en el aparador del comedor. Quizás quería estar cerca del cuchillo eléctrico, dado que eran prácticamente el mismo aparato.
Mis pechos se desarrollaron muy pronto, cuando tenía aproximadamente nueve años. Me salieron unos pechos muy raros y altos, es posible que estuvieran por encima de mi clavícula. En ese momento, llevar sujetador era no tanto para soster los pechos como para aclarar que no tenía bocio.
Debemos dejar de molestar a la gente acerca de su peso. Estar gordita durante un tiempo (siempre que no te causes diabetes) es una fase natural de la vida y nada de lo que avergonzarse. Es como la pubertad o irte convirtiendo paulatinamente en replublicano.
La política y la prostitución deben ser los únicos trabajos en los que la inexperiencia es considerada una virtud. en qué otra profesión presumirías de no conocerla? "Yo no soy uno de esos molones cirujanos del corazón de Harvard. Simplemete soy un fontanero sin licencia con un sueño: me gustaría abrirte el pecho de lado a lado"
Elegí amamantar, y fue una época maravillosa en mi vida. Me cambió totalmente como mujer y es la cosa más gratificante que he hecho nunca. Hay muchas opiniones al respecto de cuanto tiempo debe amamantarse al bebé. La organización mundial de la salud dice seis meses. La asociación americana de pediatras dice que lo ideal es un año. Las revistas sobre maternidad sugieren que debes amamantar a tu hijo hasta la cena de graduación. Os digo que debéis buscar lo que os funcione a vosotras. Para mi angelito y para mí el número mágico fueron setenta y dos horas.
En fin, que esto va quedando largo. Son dos libros muy buenos. Uno más sesudo y otro más divertido, pero ambos son sesudos y divertidos. El de Judt sé que está en español, el de Fey creo que no. Yo los tengo en inglés por si a alguien le interesan.
Voy a hablar de mis dos últimas lecturas que han sido The Memory Chalet de Tony Judt y Bossypants de Tina Fey. Los dos los he leído en el kindle y los dos en inglés. Siguiendo con las analogías, éstas ya un tanto absurdas, ambos son neoyorquinos, pero nacidos en otra parte. Uno en Londres y otra en Pensylvannia.
La verdad es que a lo mejor no es muy buena idea hablar de estos dos libros juntos, pero se me ha ocurrido, así que a ver qué sale.
El libro de Judt lo leí porque lo recomendó molinos aquí. Me costó bastante encontralo por procedimientos no comerciales, la verdad. De Judt ya me había leído Postwar, un libro que me gustó bastante. Este es diferente, no es un libro de historia. Son sus memorias y reflexiones. Es entretenidísimo de leer, escribe maravillosamente. Tal vez demasiado maravillosamente porque ha sido bastante difícil leerlo en inglés. Es de notar que tiene bastante sentido del humor, lo que en su situación no debió de ser fácil. Os lo recomiendo fervientemente, si lo queréis yo os lo paso, aunque hace falta saber inglés.
Os pongo unos fragmentos (perdón por la traducción porque es mía):
"Las noches poco productivas son frustrantes físicamente. Claro, puedes decirte a ti mismo, vamos: deberías estar orgulloso del hecho de que sigas cuerdo -¿dónde está escrito que tu debas ser, además, productivo? Y, a pesar de ello, siento cierta culpa por haber sucumbido al destino con facilidad. ¿Quién podría haberlo hecho mejor dadas las circunstancias? La respuesta, por supuesto, es un yo mejor y es sorprendente cuán a menudo deseamos ser una versión mejor de lo que somos- sabiendo perfectamente la enorme dificultad de haber llegado hasta aquí" (Me acabo de dar cuenta de que molinos había puesto la misma cita... me podía haber ahorrado traducirla)
Podría pensarse el mal gusto de considerar afortunado a un hombre sano con una familia joven derribado a la edad de sesenta años por una enfermedad degenerativa incurable de la que en breve morirá. Pero hay más de un tipo de suerte. Caer presa de una enfermedad neurodegenerativa es seguramente por haber ofendido a los dioses en algún momento, y no hay nada más que decir. Pero si tienes que sufrir así, mejor tener una cabeza bien amueblada: llena de piezas útiles que sean multifuncionales y reciclables, a disposición de una mente analítica.
No creo que haya apreciado hasta hace poco la influencia de esos primeros años de infancia en su totalidad. Mirando hacia atrás con la ventaja de nuestra posición actual, uno ve con claridad las virtudes de esa época de escasez. Nadie celebraría su vuelta. Pero la austeridad no era solo una condición económica: aspiraba a ser una ética común. Clement Atlee, el primer ministro laborista entre 1945 y 1951, emergió -como Harry Truman- de detrás de las sombras de un líder carismático del tiempo de guerra y personalizó las escasas expectativas de la época. Churchill despectivamente lo describió como un hombre modesto que tiene mucho por lo que ser modesto.
La rectitud moral en la vida pública es como la pornografía: difícil de definir, pero cuando la ves la reconoces. Describe una coherencia entre intención y acción, una ética de la responsabilidad política. Toda la política es el arte de lo posible. Pero el arte también tiene su ética.
Refiriéndose a las habilidades cocineras de su madre dice: "ella hacía lo que cualquier otra cocinera en Inglaterra en esos tiempos: lo hervía todo hasta matarlo. Tan así era que llegué a asociar la comida inglesa no tanto con la ausencia de sutileza como con la ausencia de cualquier tipo de sabor."
Quizás la consecuencia más desesperanzadora de mi enfermedad -más deprimente incluso que sus manifestaciones cotidianas- es la certeza de que nunca volveré a montar en tren. Este conocimiento pesa sobre mí como una manta de plomo, presionándome más y más dentro de ese pensamiento de un moribundo que marca a la auténtica enfermedad terminal: el entender que hay cosas que nunca voverán. Esta ausencia is más que solo la pérdida de placer, la pérdida de libertad, mucho menos la ausencia de nuevas experiencias.
Bueno, la verdad es que tengo muchísimas más citas apuntadas, pero lo que debéis hacer es leerlo.
El otro libro es mucho más divertido, pero no por ello menos interesante. Es de Tina Fey, la creadora de 30 Rock. No sé si habéis visto la serie o no, pero a nosotros nos parece divertidísima. El libro es una especie de batiburrillo entre sus memorias, consejos, respuesta a preguntas de gente de internet...
El libro me lo leí casi en su totalidad ayer entre aviones y aeropuertos y te hace reir. Nuevamente está el problema del inglés y de las referencias que hace porque muchas para mí son totalmente ininteligibles, pero hay otras con las que me he reído mucho. Voy a intentar traducir algunas, pero el humor es bastante jodido al respecto. Si no os hace gracia, es culpa mía.
Aún sin llegar a tener tres años (su hija), sabe que el pelo rubio es el rey. Y, admitámoslo, el pelo rubio tiene poderes mágicos. Podrías ponerle una peluca rubia a un calentador de agua y algún tío intentaría follárselo.
Aun siento afecto hacia los miembros de BlueCo (una compañía de teatro) como si hubiéramos peleado juntos en el ejército. Específicamente en el ejército francés, porque éramos vagos y con tendencia al escaqueo.
El peine eléctrico era un cepillo pequeño, vibrante y ruidoso que por alguna razón mi familia guardaba en el aparador del comedor. Quizás quería estar cerca del cuchillo eléctrico, dado que eran prácticamente el mismo aparato.
Mis pechos se desarrollaron muy pronto, cuando tenía aproximadamente nueve años. Me salieron unos pechos muy raros y altos, es posible que estuvieran por encima de mi clavícula. En ese momento, llevar sujetador era no tanto para soster los pechos como para aclarar que no tenía bocio.
Debemos dejar de molestar a la gente acerca de su peso. Estar gordita durante un tiempo (siempre que no te causes diabetes) es una fase natural de la vida y nada de lo que avergonzarse. Es como la pubertad o irte convirtiendo paulatinamente en replublicano.
La política y la prostitución deben ser los únicos trabajos en los que la inexperiencia es considerada una virtud. en qué otra profesión presumirías de no conocerla? "Yo no soy uno de esos molones cirujanos del corazón de Harvard. Simplemete soy un fontanero sin licencia con un sueño: me gustaría abrirte el pecho de lado a lado"
Elegí amamantar, y fue una época maravillosa en mi vida. Me cambió totalmente como mujer y es la cosa más gratificante que he hecho nunca. Hay muchas opiniones al respecto de cuanto tiempo debe amamantarse al bebé. La organización mundial de la salud dice seis meses. La asociación americana de pediatras dice que lo ideal es un año. Las revistas sobre maternidad sugieren que debes amamantar a tu hijo hasta la cena de graduación. Os digo que debéis buscar lo que os funcione a vosotras. Para mi angelito y para mí el número mágico fueron setenta y dos horas.
En fin, que esto va quedando largo. Son dos libros muy buenos. Uno más sesudo y otro más divertido, pero ambos son sesudos y divertidos. El de Judt sé que está en español, el de Fey creo que no. Yo los tengo en inglés por si a alguien le interesan.
Tina Fey es una madre sin alma ni corazón ni está conectada con el humus. ¡72 horas! fijo que ni siquiera es capaz de sentipensar.
ResponderEliminar+1 al comentario de Anniehall.
ResponderEliminarPor cierto, lleguemos a un acuerdo. Cada vez que recomiendes un libro (o una saga) deberías ponerlo en el Dropbox. Porque nos das envidia y luego perdemos el mismo tiempo precioso que tú en buscarlos.
En mi caso he empezado dando ejemplo con "Milenio negro" de J.G. Ballard.
Soy muy fan de Tina. Pero mucho. Desde que hacía el Weekend Update con Jimmy Fallon.
ResponderEliminarY Judt también tiene buena pinta.
Así que quiero. Los dos.Gracias
Y si Tina dice que 72 horas, pues es que 72 horas es lo ideal, hombreyá.
ResponderEliminarBueno, los pongo, aunque también antes de buscarlo, puedes pedírmelo, que estamos a cuatro metros :-)
ResponderEliminarBichejo, eso denota tu buen gusto y exquisito sentido del humor. Te los mando por correo.
ResponderEliminarND, la cita sobre la austeridad moral también la colgué yo!!...jijiji..no me lees atentamente.
ResponderEliminarEl siguiente de Judt será " Algo va mal"..¿ viste la entrevista que colgué en el post?
72 horas es más que suficiente para darte cuenta de que jamás estarás vestida de azul celeste en tu sofá beige babeando de amor maternal.
Solo he visto el principio de la entrevista y me volvieron a entrar ganas de comprarme las memorias de Arthur Koestler. A ver si tengo tiempo y la veo entera.
ResponderEliminarEn su momento sí que me leí el post, de ahí el querer leerlo, pero no iba a ir cita por cita viendo si la habías puesto o no XD
ND yo ya me compré " El cero y el infinito"..lo tengo para leer este verano, luego te lo paso si quieres.
ResponderEliminaryo estoy pensando en comprarme las memorias en formato digital, que son 12€ más baratas. Lo que pasa es que hay que quitarle la protección.
ResponderEliminarSi lo hago ya te lo pasaré.
Como me fastidian estos post de libros, me pongo muy nerviosa... Me dan miedito, siempre voy con retraso sobre vuestras lecturas y os leo en diagonal, a ver si va a haber spoiler, que yo soy muy especialita.
ResponderEliminarEl de "Algo va mal" yo ya me lo he leído. Es un Judt, no digo más.
En la portada del libro las manos no son de Tina ¿Verdad?
ResponderEliminarNo, no lo son, patito, o eso espero ;-)
ResponderEliminarAmanita, pues lo siento. Normalmente intento no revelar nada del libro, pero tienes razón en que cada uno somos para eso muy especialitos. :D
ResponderEliminarEl de Judt lo he comprado hoy para regalárselo a mi chico en nuestro primer aniversario...la culpable es Moli :)..el otro me lo tengo que comprar para mí YA...me han encantado las citas...
ResponderEliminarYo he dado de mamar un total de 13 meses a repartir entre mis dos hijos :))
Pues espero que los disfrutéis. Gracias por comentar, madamer, y ya nos contarás lo que os han parecido.
ResponderEliminarYa he leído Bossypants y me ha gustado. Lo que menos cuando responde a las cosas que dicen de ella en Internet. Lo que más todo lo de su EPIC momento Sarah Palin.
ResponderEliminarMe encanta toda ella y me ha parecido una tía con los pies en el suelo. Y adoro 30 Rock.
Sí, es una tía muy lista y muy divertida. Me alegra que te haya gustado.
ResponderEliminarY vaya velocidad! Ni un día te ha durado...