Doña Perfecta
Hoy toca, como cada primero de mes, hablar del libro del Club de Lectura. Este mes toca Doña Perfecta de Don Benito. Este libro lo eligió Livia y ya lo había leído (como todos los que ha elegido este año). ¿Sería otro Laura Díaz?
En la segunda página del libro leí esto: "vio este que se acercaba otro empleado con un farol pendiente de la derecha mano, el cual movíase al compás de la marcha, proyectando geométrica serie de ondulaciones luminosas", así que me temía lo peor...
Pero la verdad es que el libro está muy bien. Me parece con un estilo un poco apolillado, pero es una historia muy buena. De hecho, es un poco pesadillesca. Unos cuantos años más tarde, no muchos, tendríamos a Kafka que da una vuelta más de tuerca ―por ejemplo en el Castillo al que este libro me ha recordado― y transformará el desasosiego de una historia como esta en una pesadilla en toda regla.
Porque la historia comienza con Pepe llegando a Orbajosa, pueblo de su padre y donde vive su tía doña Perfecta, lleno de optimismo y felicidad y poco a poco se va cerniendo sobre él una sombra de desasosiego, de asfixia y de opresión que va transformando el relato y mostrándonos otra cara de doña Perfecta. Va para casarse con Rosario y dice que "lo principal en Rosario era que tenía tal expresión de dulzura y modestia, que al verla no se echaban de menos las perfecciones de que carecía. No es esto decir que era fea; mas también es cierto que habría pasado por hiperbólico el que la llamara hermosa, dando a esta palabra su riguroso sentido".
Tampoco quiero contar mucho más porque no quiero desvelar nada más que lo necesario para suscitar vuestro interés.
Tampoco quiero contar mucho más porque no quiero desvelar nada más que lo necesario para suscitar vuestro interés.
He puesto la carátula de la película porque ese subtítulo de "la tragedia de una mujer que se creía buena" resume bastante bien la historia. Retrata una España en la que en muchos aspectos podemos seguirnos viendo reflejados: la envidia, el rencor, la ignorancia... De hecho la última frase del libro es "Esto se acabó. Es cuanto por ahora podemos decir de las personas que parecen buenas y no lo son".
Algún otro párrafo:
"Eran aquellos varones insignes lo más granado de la ilustre ciudad, propietarios ricos los unos, pobrísimos los otros; pero libres de altas aspiraciones todos. Tenían la imperturbable serenidad del mendigo, que nada apetece mientras no le falta un mendrugo para engañar al hambre y el sol para calentarse".
"No existe nada tan interesante como un ejército. Es la patria en su aspecto juvenil y vigoroso. Lo que en el concepto individual tiene o puede tener esa misma patria de inepta, de levantisca, de supersticiosa unas veces, de blasfema otras, desaparece bajo la presión férrea de la disciplina que de tantas figurillas insignificantes hace un conjunto prodigioso".
"―Mi sobrino, no es mi sobrino, mujer: es la blasfemia, el sacrilegio, el ateísmo, la demagogia... ¿Sabes lo que es la demagogia?
―Algo de esa gente que quemó a París con petróleo, y los que aquí derriban las iglesias y fusilan las imágenes... Hasta ahí vamos bien.
―Pues mi sobrino es todo eso... ¡Ah!, ¡si él estuviera solo en Orbajosa!... Pero no, hija mía. Mi sobrino, por una serie de fatalidades, que son otras tantas pruebas de los males pasajeros que a veces permite Dios para nuestro castigo, equivale a un ejército, equivale a la autoridad del gobierno, equivale al alcalde, equivale al juez; mi sobrino no es mi sobrino, es la nación oficial, Remedios; es esa segunda nación, compuesta de los perdidos que gobiernan en Madrid, y que se ha hecho dueña de la fuerza material; de esa nación aparente, porque la real es la que calla, paga y sufre; de esa nación ficticia que firma al pie de los decretos y pronuncia discursos y hace una farsa de gobierno y una farsa de autoridad y una farsa de todo. Eso es hoy mi sobrino; es preciso que te acostumbres a ver lo interno de las cosas. Mi sobrino es el gobierno, el brigadier, el alcalde nuevo, el juez nuevo, porque todos le favorecen a causa de la unanimidad de sus ideas; porque son uña y carne, lobos de la misma manada..."
Pues un libro bastante bueno y que os recomiendo. Además os lo podéis descargar gratis en Amazon, si queréis.
Tenéis otras reseñas mucho más interesantes que estas en los blogs de Carmen, Juanjo, Livia y Bichejo (sí, tiene nuevo blog). ¡Corred a leerlas!
Algún otro párrafo:
"Eran aquellos varones insignes lo más granado de la ilustre ciudad, propietarios ricos los unos, pobrísimos los otros; pero libres de altas aspiraciones todos. Tenían la imperturbable serenidad del mendigo, que nada apetece mientras no le falta un mendrugo para engañar al hambre y el sol para calentarse".
"No existe nada tan interesante como un ejército. Es la patria en su aspecto juvenil y vigoroso. Lo que en el concepto individual tiene o puede tener esa misma patria de inepta, de levantisca, de supersticiosa unas veces, de blasfema otras, desaparece bajo la presión férrea de la disciplina que de tantas figurillas insignificantes hace un conjunto prodigioso".
"―Mi sobrino, no es mi sobrino, mujer: es la blasfemia, el sacrilegio, el ateísmo, la demagogia... ¿Sabes lo que es la demagogia?
―Algo de esa gente que quemó a París con petróleo, y los que aquí derriban las iglesias y fusilan las imágenes... Hasta ahí vamos bien.
―Pues mi sobrino es todo eso... ¡Ah!, ¡si él estuviera solo en Orbajosa!... Pero no, hija mía. Mi sobrino, por una serie de fatalidades, que son otras tantas pruebas de los males pasajeros que a veces permite Dios para nuestro castigo, equivale a un ejército, equivale a la autoridad del gobierno, equivale al alcalde, equivale al juez; mi sobrino no es mi sobrino, es la nación oficial, Remedios; es esa segunda nación, compuesta de los perdidos que gobiernan en Madrid, y que se ha hecho dueña de la fuerza material; de esa nación aparente, porque la real es la que calla, paga y sufre; de esa nación ficticia que firma al pie de los decretos y pronuncia discursos y hace una farsa de gobierno y una farsa de autoridad y una farsa de todo. Eso es hoy mi sobrino; es preciso que te acostumbres a ver lo interno de las cosas. Mi sobrino es el gobierno, el brigadier, el alcalde nuevo, el juez nuevo, porque todos le favorecen a causa de la unanimidad de sus ideas; porque son uña y carne, lobos de la misma manada..."
Pues un libro bastante bueno y que os recomiendo. Además os lo podéis descargar gratis en Amazon, si queréis.
Tenéis otras reseñas mucho más interesantes que estas en los blogs de Carmen, Juanjo, Livia y Bichejo (sí, tiene nuevo blog). ¡Corred a leerlas!
Es el paletismo, la cerrazón...y sobre todo, lo que dice el cartel de la peli, que ella de verdad se cree tan buena...a mí me ha horrorizado como personaje, una vez que empiezas a barruntar por dónde van los tiros se pone todo mucho más interesante.
ResponderEliminarSí, es mala como la tiña. Egoísta, cerrada, prejuiciosa... una joya
ResponderEliminarEse libro lo leí hace muchos años.
ResponderEliminarMe impresionó la maldad del personaje y lo engañada que estaba por ella misma. Creo que el libro es un esfuerzo ilustrativo del determinismo del entorno y de cómo se forma la opinión que tenemos de nosotros mismos. El estilo y el lenguaje, pues sí, ya no lo usamos y nos parece apolillado.
Mi suegra tiene un carácter y una ideología muy similar y no es española, es de una ciudad pequeñita del centro de México. Afortunadamente vivo muy lejos de ella.
La verdad comento porque la carátula de la película me llamó mucho la atención, la imagen que se ve al fondo, estoy segura, es de la ciudad en donde crecí. Nunca he visto esa película, ahora tengo curiosidad.
Pues muchas gracias por comentar en el blog, Anónima. Yo encontré la carátula de la película cuando estaba buscando una imagen para el post y también tengo curiosidad por ver la película.
ResponderEliminarDoña Perfecta cree que es buena siendo mala como la tiña. Y eso sí es algo que yo creo que todos hemos conocido. Claro, que también te plantea la pregunta de si ella no sabe que es mala, ¿cómo sé yo que soy bueno? ¿o soy un Don Perfecto?
Ella no sabe que es mala. Pero tampoco creo que se lo plantee. Ella es "como debe ser", es una mujer intolerante, como todos los que aman el poder por encima de todo. Porque yo creo que es una cuestión de poder: ella lo tiene y lucha por conservarlo.
ResponderEliminarSobre el lenguaje apolillado... las polillas ya murieron. Quedó la naftalina. Pero reconozco que la novela está muy bien construída y que mantiene su interés.
Don Benito siempre engancha, ya hace años que la leí, apenas la recuerdo.
ResponderEliminarBesos
Pues yo creo que ella no se cree tan buena como quiere aparentar, otra cosa es que desde su punto de vista el fin justifique los medios de manera que su conciencia está tranquila.
ResponderEliminarA mí lo que más me ha gustado del libro es la forma de llevar la historia desde lo idílico a lo infernal de una manera tan tranquila como inevitable, vamos que me ha gustado mucho a pesar de lo poco acostumbrado que estoy a ese tipo de lenguaje, admito que no me he despegado del diccionario.
Siendo Pérez Galdós mi autor favorito, no me he leído Doña Perfecta porque siempre he oído que es una "obra menor" una de las primeras, cuando aún practicaba la "novela de tesis", aunque muy bien escrita (como no podía ser menos).
ResponderEliminarEs mi problema con Don Benito, que espero tantísimo, que ando con pies de plomo. De momento voy saciando mi hambre con los Episodios Nacionales, con los que parece que nos estamos poniendo en tres por año.
Ah, Orbajosa vuelve a aparecer (de refilón) en Incógnita y La Realidad.
Carmen, yo creo que, como dice Juanjo, ella sabe que usa su posición de superioridad de una manera abusiva, pero se autojustifica pensando que es por un objetivo justo. El fin justifica los medios...
ResponderEliminarJuanjo, totalmente de acuerdo. A mí también me ha gustado mucho esa transición desde la postal idílica hacia la tragedia y la impotencia de Pepe sobre su propio destino.
Tita, es un valor seguro, sí.
Loquemeahorr, pues a tres Episodios por año tienes para una década... A mí me han gustado más los Episodios que he leído que este libro, pero aún así me ha gustado mucho Doña Perfecta.
En la facultad tenía un profesor que decía que aprovecháramos para leer en esos años que después todo son relecturas… mwahahahaha
ResponderEliminarInsisto en que ¿pensáis de veras que ella se cree buena? Tiene sentido conste, pero me cuesta creerlo… Estoy más con Carmen, ella se ve a sí misma como “debe ser” pero sabiendo que si para eso tiene que hacer el mal, lo hace… y entonces llego al comentario de Newland y lo firmo entero XD.
Loquemeahorro: no es menor, Galdós no tiene obras menores ;P es... es... ¡Galdós!
Agradezco mucho la respuesta Niño desgraciaíto, no firmé y me disculpo.
ResponderEliminarLas preguntas que formulas son muy válidas y éticas y resumen en dos preguntas el planteamiento de la novela ¿parecer bueno es lo mismo que serlo?
Creo que Galdós estaría contento si se enterara que más de 100 años después su novela aún es leída, comprendida y genera extrapolaciones personales.
No lo había pensado, pero lo que comenta Carmen J. es muy cierto, la postura de Doña Perfecta tiene mucho que ver con el deseo de conservar el poder.
No estoy segura de que tenga conciencia de ser mala, mi impresión es que si la tiene, también está claro que siempre puede confesarse bien segura de ser absuelta, que para ello tiene al cura comiendo de su mano.
Me gustan mucho los libros del XIX (tal vez porque crecí leyéndolos) pero sólo he leído dos de Galdós, éste y Marianela.
Q.Beta
No critico en absoluto el que no firmaras, Q.Beta. Simplemente te llamaba anónima porque es como aparecías.
ResponderEliminarLeyendo este libro me ha llamado la atención o su modernidad o más bien lo poco que hemos cambiado. Todos esos prototipos son fácilmente asociables a personas que la mayoría hemos conocido.
Pásate por el club cuando quieras!