Is Gwyneth Paltrow wrong about everything?
"La cultura de la celebridad es un fenómeno sistémico. Gwyneth puede estar tarada, pero ella no creó las condiciones sociales y psicológicas que han dado a la cultura de las celebridades su considerable influencia. Como menciona Sternheimer, la cultura de la celebridad es una "fantasía colectiva". No la han impuesto ni Gwyneth, ni Pamela, ni People, ni Hollywood desde arriba. Es una fuerza que refleja y modifica nuestras esperanzas y nuestros deseos creando la atractiva ilusión de que una belleza trascendente y que fama y fortuna pueden obtenerse y adquirirse por parte de cualquiera. Parece que estamos atrapados en un gran e infinito ciclo realimentado de celebridad que funciona así: disminuir la mobilidad social y las opciones vitales lleva a mayores sueños de fama y riqueza. Esto, a su vez, incrementa el poder y atractivo de la celebridad que se centra (quizás con un objetivo narcisista incremental) en aspiraciones extrínsecas que lleva a menos felicidad y nos distrae (y a la sociedad en general) de acciones que podrían mejorar la mobilidad social tales como educación y el deseo de que cambie la sociedad".
Timothy Caulfield. Is Gwyneth Paltrow wrong about everything?
Hay veces que no sé de dónde saco títulos para leer y otras veces los veo mencionados en alguna parte y sé que tengo que leerlos. Esta vez ha sido de esta última manera. Leí este artículo en El País y supe que este libro me iba a gustar. Y así ha sido.
El libro, escrito por un profesor universitario, tiene como premisas comprobar qué hay de cierto en todo lo que anuncian los famosos (remedios de belleza, cremas, dietas, batidos e incluso limpiezas de colon) y por otro lado porqué vivimos en una sociedad (especialmente la americana) en la que ser famoso es un fin en sí mismo y no como consecuencia de sobresalir en algún campo del conocimiento o del arte.
Como véis el objetivo del libro es muy interesante y ambicioso y el autor consigue escribir un libro súper entretenido y no muy largo (Bichejo, lo he mirado y son menos de 300 páginas).
El autor entrevista a famosos, a científicos, a wannabees, incluso se apunta a castings como el de American Idol; sigue las dietas o tratamientos que recomiendan las famosas (especialmente las de Gwyneth por la que siente una atracción especial). Y a la vez explica los riesgos, lo que no está demostrado por la ciencia o lo que está demostrado que no funciona.
El resultado es desolador, claro. Por ejemplo nos recuerda que ninguna crema (sin receta) funciona. Es curioso que este es el campo en el que menos estudios rigurosos se han hecho. Parece ser que con no ser peligrosas para la piel es suficiente y no se va más allá por parte de instituciones independientes para ver si realmente funcionan. Las dietas Detox son un bulo y se llevan nuestro dinero para nada. La celulitis no desaparece. Vivir en el campo o comer productos orgánicos no es más sano que vivir en la ciudad y comer normal. También es cierto que ya lo sabíamos. Lo que es curioso -y de lo que también se habla en el libro- es de cómo a pesar de eso se mueven cifras mareantes con todas estas cosas.
El libro tiene una segunda parte en la que se analiza las posbilidades de ser famoso -las escasas posibilidades, claro- y por qué eso se quiere conseguir. ¿Hay más felicidad entre los famosos? ¿Hay menos suicidios, menos divorcios? La respuesta es que no y a pesar de eso infinidad de personas están dispuestas a todo para conseguir un sueño que es imposible y que no da la felicidad.
Especial atención me ha merecido el caso de los padres que dedican todos los esfuerzos y el dinero que tienen y que no tienen a que sus hijos cumplan sueños irrealizables. Es escalofriante ver la cantidad de dinero y de esfuerzo que podrían invertir en una mejor educación que, como se destaca en el libro, es la única herramienta demostrada de ascenso social y de mejora para conseguir trabajos mejor pagados y más gratificantes.
En fin, tampoco os voy a contar el libro, pero os tengo que decir que es muy interesante y entretenido. Si yo fuera vosotros iría corriendo a leerlo, pero como no lo soy y ya me lo he leído pues termino esta reseña y todos tan contentos.
Menos mal que el libro no se queda en responder a la pregunta del título, porque para eso ya teníamos respuesta antes: ¡SÍ!
ResponderEliminarSí parece interesante.
Me satisface mucho comprobar que no soy la única que se pregunta cosas sobre estos temas.
ResponderEliminarA mí me fascinan esos "reportajes" cuya única finalidad parece ser convencernos de que una modelo casada con un futbolista, son los más felices del mundo porque son guapos, ricos, famosos y tienen un niño muy mono.
ResponderEliminarA ver, tener pareja está muy bien (si quieres), aunque desgraciadamente, la "durabilidad" de este tipo de uniones no suele ser mucha en ese mundillo.
Tener un niño (si quieres), pues también, pero mucha, muchísima gente tiene hijos y dudo que el hecho de sean guapos o feos, les produzca una mayor/menor felicidad en los padres, digo yo que más les importará que estén sanos y se críen sin problemas.
¿Tener dinero es mejor que no tenerlo? Definitivamente, sí.
¿Ser guapo es mejor que no serlo? Pues probablemente, también
¿Que en una pareja ambos sean guapos, es bueno, o es malo? ¿Significa que su relación de pareja va a ser mejor/más duradera? ¿Y la fama? ¿Provoca felicidad? ¿Ayuda a que una pareja sea más feliz? ¿Sean mejores padres?
En fin,q ue me alegra que alguien más se cuestione estas cosas.
Desde luego el título del libro funciona, en cuanto lo he leído he venido corriendo a leer tu entrada. Dicho lo cual, pero qué ha hecho la pobre Gwyneth? jajajaja
ResponderEliminarEs muy interesante, Anniehall. Te lo recomiendo.
ResponderEliminarGordipé, son pensamientos bastante normales, creo yo. Pero a lo mejor es que nosotros no somos normales...
Loquemeahorro, este libro se basa en responder todas esas preguntas que te asaltan. La verdad es que es lo que se plantea el autor. Vale la pena ser famoso? Por qué quiere serlo la gente? Y por qué los padres quieren que sus hijos lo sean siendo algo inalcanzable?
Speedy, la verdad es que el título engancha y el libro también.