Entrar en el hiperespacio
Aunque os pueda engañar el título del post, aquí de lo que vamos a hablar es de lo de casi siempre. Sí, vamos a hablar de libros. Bueno, más concretamente de lecturas.
Yo soy un lector, eso está claro. Y he estado pensando en qué es lo que me gusta de leer, o qué es lo que busco cuando empiezo un libro nuevo. Lo que busco como lector es encontrar ese libro que me hace sentir esto:
Y ¿qué es sentir eso? Os preguntáis mientras claváis en mi pupila vuestra pupila azul. Pues hiperespacio eres tú. Bueno, no, tampoco.
Es ese libro que te absorbe y que hace que todo lo que pasa a tu alrededor desaparezca, que entres en el hiperespacio, que de repente mires el reloj y veas que ha pasado mucho más tiempo del que creerías posible. Ni que decir hay que encontrar ese tipo de libros es una misión bastante difícil. Tienen que darse una serie de coincidencias astrales difíciles de enumerar y, por supuesto, imposibles de planificar.
Hacía tiempo que no me sucedía con un libro y me está pasando una vez liberado de los tedios del club de lectura. Terminé el libro de este mes el viernes y estando fuera de casa tuve que elegir qué empezar tirando de lo que tenía disponible. Y en esto saltó desde las profundidades David Copperfield y con él estoy. Completamente absorbido por sus desventuras (la mayoría) y aventuras (también bastantes).
Y, nada, eso es lo que quería contaros. Quería compartir con vosotros mi hiperespacio. Y ya de paso preguntaros qué libros os han hecho pasar al hiperespacio. Ya os digo que eso es algo particular de cada uno y lo que a un lector le encanta a otro le horroriza, pero también me gustaría saber si esa sensación es solo mía o es algo habitual.
También hay veces que pasa esto:
Pero de gatillazos hiperespaciales mejor hablamos otro día, ¿no?
Hacía tiempo que no me sucedía con un libro y me está pasando una vez liberado de los tedios del club de lectura. Terminé el libro de este mes el viernes y estando fuera de casa tuve que elegir qué empezar tirando de lo que tenía disponible. Y en esto saltó desde las profundidades David Copperfield y con él estoy. Completamente absorbido por sus desventuras (la mayoría) y aventuras (también bastantes).
Y, nada, eso es lo que quería contaros. Quería compartir con vosotros mi hiperespacio. Y ya de paso preguntaros qué libros os han hecho pasar al hiperespacio. Ya os digo que eso es algo particular de cada uno y lo que a un lector le encanta a otro le horroriza, pero también me gustaría saber si esa sensación es solo mía o es algo habitual.
También hay veces que pasa esto:
Pero de gatillazos hiperespaciales mejor hablamos otro día, ¿no?
MI hiperespacio con clásicos: David Copperfield, Crimen y Castigo, Los Miserables.
ResponderEliminarDejo solo esos tres pero tengo muchos más. Y sí, es una sensación increíble.
El amor en los tiempos del cólera, Cien años de soledad, Crimen y Castigo y Fortunata y Jacinta, Los Gozos y las Sombras, y casi todo Delibes.
ResponderEliminarTener sed del hiperespacio y no encontrar puerta es horrible.
¡Por eso releo!
Besos
Tu hiperespacio es lo que vienesiendo el enganche de toda la vida...no?
ResponderEliminarOrgullo y prejuicio, El perfume, La metamorfosis... son los que me engancharon a mí
Seguro q hay algunos mas. Si me acuerdo,lo añado.
Los dramas de situaciones que me parecen insuperables.Desde luego de niña recuerdo "Oliver Twist", de mayor "Cuando Dios aprieta, ahoga pero bien", de adolescente "Flores en el ático".Ya ves, en mi caso...más que la forma es el contenido, historias tremendas como "el pijama a rayas" que desde el principio adivinas el final por aquello de que todo el mundo había comentado que era sorprendente . "El curioso incidente del perro a medianoche" es otro libro que creo que me absorbió.
ResponderEliminarDe todas maneras cada vez menos ....supongo que es la edad....o lo mucho leído....me tiene que sorprender para engancharme."Como agua para chocolate" ;los sudamericanos en general me atraen más por el derroche de fantasía.
Sí, sí, sí, sí que me ha pasado, y con David Copperfield, precisamente.
ResponderEliminarQué llantina en el Metro (donde leo) cada vez que Pegotty le recordaba que en su casa siempre tendría el libro del cocodrilo.
Hasta me pongo tontorrona cuando veo la portada de Alba...
Y no sé, muchos Galdós así.. en bloque, "Matar a un ruiseñor", "Cuatro Hermanas", "Una temporada para silbar", , "La Prima Bette", "Papaíto Piernas Largas", Pushkin, "Ana Karénina"...
Molinos, de los tres que mencionas en dos, bueno, uno y medio, estoy de acuerdo. Los miserables no me lo he leído. Veremos...
ResponderEliminarTita, muy de acuerdo en varios, casi todos menos Fortunata y Jacinta que no me lo he leído.
Phaskyy, es algo más que un enganche. Es que te pones a leer y el mundo desaparece o al menos va a otra velocidad. Los tres que pones me los he leído y me gustaron mucho.
Pseudosocióloga, recuerdo haber leído el de Cándida, pero no me acuerdo mucho de la historia en sí. Tienes razón en que los sudamericanos, algunos, tienen libros increíbles que enganchan rápidamente.
Loquemeahorro, David Copperfield es impresionante. Galdós me gusta mucho, el de la temporada para silbar se lo leyó Anniehall y no le pareció maravilloso. Con Anna Karenina tengo prejuicios porque Guerra y Paz me gustó, pero tampoco tanto.
La Ciudad y los Perros cuando tenía 14 años, Conversación en la Catedral con más de 20 y La Fiesta del Chivo con más de 25, todos de Vargas Llosa.
ResponderEliminarQuo Vadis? cuando tenía 15, junto con Los Miserables y Nuestra Señora de París. Me marcaron totalmente. Crimen y Castigo y Los Hermanos Karamazov me marcaron menos.
Me excitaba muchísimo con Pájaros de Fuego y Delta de Venus, de Anais Nin, a los 15 también.
De García Märquez me quedo con El General en su Laberinto y Relato de un Náufrago.
De Cela, millones: San Camilo, 1936. El Asesinato del Pededor. Mazurca Para Dos Muertos. Cristo Versus Arizona. El Gallego y Su Cuadrilla, que estoy releyendo ahora... es una literatura que sólo se pueda dar en castellano y en esos momentos que fueron.
Siempre leí poesía de vez en cuando: Machado, Lorca, Oliverio Girondo, Benedetti, Neruda... y vuelvo a ella de vez en cuando, para vivir despacio.
El Jinete Polaco me marcó mucho y por él perseguí a Muñoz Molina, pero nunca se superó.
De los últimos años leídos destaco a Saramago, con Ensayo Sobre la Ceguera, a Philip Roth con cualquiera y a Cormac McCarthy con The Road, pero sobre todo con Meridiano de Sangre, un libro que me llevó a al hiperespacio desde la primera página, y todavía persiste su misterio insondable sobre mi cabeza.
El año pasado hice un paréntesis y leí El Gatopardo para darme cuenta de que las obras maestras de Miguel Ángel en escultura son lo mismo que esa joya única de Lampedusa en literatura.
Leer te da siempre mucho más placer que una buena cagada, un buen polvo sudoroso, atlético y carnal o un buen pajote en homenaje a Onán.
Gracias por el post, maestro.
Menuda vehemencia, Martillo Pilón!
ResponderEliminarSi todos esos libros de transportaron al hiperespacio puedes darte con un canto en los dientes. No creo que yo haya leído tantos con los que haya tenido esa sensación.
Mucho gafapastismo veo por aquí...¿nadie ha entrado en trance hiperespacial con Stephen King o Dan Brown? Pues yo sí.
ResponderEliminarUna cosa es la calidad o lo que te pueda gustar una novela, y otra lo del hiperespacio, al menos para mí. El hiperespacio es empezar a leer después de comer "La sombra del viento" y que de repente sea de noche y te queden veinte páginas.
No sé si es la edad o el proceso de descreimiento lector, pero es algo que cada vez pasa menos. Eso de no saber ni dónde estoy mientras leo no me pasa desde el verano, con Mr. King y "La cúpula"
Y en cosas algo más culturetas, por estar a la altura, me embobé plenamente con Cien años de soledad.
Ell frontal de ambas naves es idéntico y me parece que se lo han sacado de la cabina de metralletas de los aviones de la 2ªGM. Que puede impactar mucho, pero nadie en su sano juicio quiere alcanzar velocidad hiperespacial, lo que quiera que sea eso, con esos hierros y esos remaches. Miedo, miedo.
ResponderEliminarA mi me gusta la ciencia ficción y Agatha Christie, y lo flipaba con LeCarre. Pero leo muy poco, sobre todo cuando tengo que empollarme algún manual técnico de programación que es a menudo. De hecho me he dado cuenta que ambos tipos de lectura son inversamente proporcionales. Un saludo.
Bichejo, como a Pseudosocióloga, me absorvió Flores en el ático. Me leí toda la saga, imposible dejarla, pero estaba indignada por la crueldad, no me gustaba mucho el estilo, pero el tema no me dejaba soltarlo. No me gusta como me manipula Dan Brown para hacerlo interesante. La sombra del viento sí me llevó al hiperespacio, se me ha olvidado. Como Almudena Grandes por ejemplo, que salvo Te llamaré viernes, cualquiera me atrapa.
ResponderEliminarPara mí el hiperespacio es ese que además de trasladarte, quieres volver. Por eso no he metido a Flores en el ático, o a los de Camilla Lackberg que también me los he zampado todos, y los que salgan, pero no me hace sentir lo mismo que Fortunata y Jacinta o Cien años de Soledad, o que El amor en los tiempos del cólera. También Isabel Allende me lleva al hiperespacio...y me he enterado ahora que es vulgar y lectura de adolescente, pueeeeeeeeees para mí sigue siendo hiperespacial!!!!
Pseudo...el de Cándida creo que lo he leido unas cinco veces. Dios mío, qué vida la suya.
Bichejo, totalmente de acuerdo. Hay muchos best sellers que enganchan. A mí me ha pasado con los de parque jurásico o con ángeles y demonios entre otros. También con Misery, por relacionarlo con el de este mes del club. Puede que también se pierda algo de sorpresa o fascinación al ir leyendo más, aunque no sé.
ResponderEliminarYo ahora estoy fascinado por David Copperfield y es un libro que salió por entregas y fue un best seller en toda regla por entregas durante año y medio.
DM, es cierto que el tiempo de lectura es más o menos limitado y que si te pones a leer cosas técnicas no tienes luego tanto tiempo o ganas para otras cosas. Bichejo es también una gran fan de Lady Agatha.
ResponderEliminarTita, haces bien en diferenciar. Hay dos tipos de lectura, la que te atrapa y te entretiene y la que te atrapa y te cambia. El tema da para mucho, sin duda.
Llego tarde, pero este tema me encanta, de hecho lo abordé hace poco con una de mis amigas.
ResponderEliminarConcuerdo con lo que mencionas que generalmente una es la lectura que te atrapa y entretiene y otra la que te cambia, idealmente las tres debieran suceder pero es raro, y con los años un viajecito al hiperespacio me pasa cada vez menos (bu).
Hay muchos libros que me han hecho olvidar mi presente, dos que recuerdo con especial cariño son El fistol del diablo de Manuel Payno que me dejaba tan embobada a los 10 años que olvidaba comer y Lo que el viento se llevó de Margaret Mitchell, que por más que es un libro racista me encanta y lo he releído varias veces.
Qué post tan ameno y los comentarios también.
Saludos
Q.Beta
Q.Beta, gracias por comentar y por los elogios. Yo creo que a todos los que leemos nos ha pasado esto. Yo no me he leído lo que el viento se llevó, pero tiene pinta de novelón que atrapa.
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