84, Charing Cross Road
El libro de este mes del club de lectura fue propuesto por Bichejo y es un libro muy cortito y muy bonito, lo cual se agradece después de los tochazos que nos hemos metido entre pecho y espalda durante los últimos meses.
La autora es Helen Hanff y este dato, que puede parecer banal, no lo es tanto cuando eres tan despistado como yo —o más bien cuando prestas tan poca atención como yo a ese hecho— y no te enteras hasta el final del libro de que la historia que te están contando no es una novela, sino que son cartas auténticas de personas auténticas que mantuvieron esa correspondencia durante dos décadas y terminaron siendo una parte importante de sus respectivas vidas sin que llegaran a conocerse en persona.
Así que mi lectura es un tanto excéntrica dado que yo apreciaba como estaban las escenas, que yo creía inventadas, en las que hablaban de la comida (no sabía de la existencia del huevo en polvo), o de los precios de los libros, o de la coronación de Isabel II, pero lo atribuía más a la documentación de la escritora que a que eso era de lo que hablaban realmente porque eran personas en lugar de personajes.
Eso me pasa por leer sin fijarme o sin hacer una labor previa de informarme acerca de la autora. Así que muy mal. Shame on me!
El libro es una recopilación de estas cartas entre una guionista y escritora de Nueva York y el personal de una librería sita (¡qué bien me expreso!) en 84, Charing Cross Rd. La postguerra de Reino Unido fue bastante dura con racionamientos, por ejemplo, y los costes de los préstamos de guerra y el tener que pagarlos les resultó muy duro (es lo que tiene tener deudas, que hay que pagarlas). Más que a alguno de los países perdedores, por cierto. En este contexto Helene Hanff leyó un anuncio en un periódico sobre esta librería de segunda mano y empezó a hacer pedidos. La relación, al principio formal, se va haciendo más amistosa y personal y empiezan a aparecer cartas escritas y mandadas a hurtadillas sin que se enteraran los demás miembros de la librería. Hay un momento bastante gracioso cuando todos los miembros de la librería, cada uno por su parte, salvo Frank Doel (el principal interlocutor) le agradecen un envío de comida y cuando finalmente Frank vuelve de viaje comenta la falta de educación y la rudeza de no habérselo agradecido antes. Empieza siendo un diálogo postal entre dos personas, Helene y Frank, y se van añadiendo voces poco a poco del resto de trabajadores y de la mujer de Frank.
Tampoco creo que sea un libro que se pueda destripar, la verdad. A no ser que seáis tan melones como yo y no os deis cuenta de que es una historia real... pero, vamos, vosotros sois muy listos.
Me he animado a ver la película que está interpretada por Anne Bancroft y Anthony Hopkins y he de decir que es una adaptación bastante buena y que es una película mucho más que recomendable. Vedla si tenéis ocasión.
Os pongo unos párrafos:
Aquí se pone hecha un basilisco porque la edición de la biblia que le mandaron a Helene, siendo judía, no era la que quería: "Pero tengo una cuñada católica, otra cuñada metodista, toda una legión de primos presbiterianos (por mi tío abuelo Abraham, que se convirtió) y una tía que es sanadora de la Iglesia de la Ciencia Cristiana, y me gusta pensar que ninguno de ellos aprobaría esta Biblia anglicana latina si conocieran su existencia. (En realidad, no conocen ni la existencia del latín.)".
Sobre el primer intento serio frustrado de ir a Inglaterra de Helene: "Confío en que tú y Nora hayáis disfrutado de unas buenas vacaciones. Yo he pasado las mías en Central Park, porque Joey, mi querido dentista, me ha concedido también un mes de descanso (se fue de viaje de luna de miel..., una luna de miel que yo he financiado en gran parte). ¿Te conté que la primavera pasada me dijo que tenía que ponerme fundas en todos mis dientes o arrancármelos? Yo me decidí por las fundas..., porque me he acostumbrado a tener dientes. Pero el importe del arreglo es astronómico. Así que Isabel va a tener que subir al trono sin mí: la única coronación a la que voy a poder asistir en los dos próximos años, me temo que será la de mis dientes".
"¿Tienes el Viaje a América de De Tocqueville? Alguien tomó prestado el mío, y no me lo ha devuelto. ¿Por qué será que personas a las que jamás se les pasaría por la imaginación robar nada encuentran perfectamente lícito robar libros?"
"Cualquier erudito hubiera sabido que la Ródope de Landor era la misma Ródopis que le había sacado hasta el último céntimo al hermano de Safo, pero yo no soy una erudita: me pasé un invierno aprendiéndome estoicamente de memoria las declinaciones griegas, pero ellas solas me abandonaron después".
Me he animado a ver la película que está interpretada por Anne Bancroft y Anthony Hopkins y he de decir que es una adaptación bastante buena y que es una película mucho más que recomendable. Vedla si tenéis ocasión.
Os pongo unos párrafos:
Aquí se pone hecha un basilisco porque la edición de la biblia que le mandaron a Helene, siendo judía, no era la que quería: "Pero tengo una cuñada católica, otra cuñada metodista, toda una legión de primos presbiterianos (por mi tío abuelo Abraham, que se convirtió) y una tía que es sanadora de la Iglesia de la Ciencia Cristiana, y me gusta pensar que ninguno de ellos aprobaría esta Biblia anglicana latina si conocieran su existencia. (En realidad, no conocen ni la existencia del latín.)".
Sobre el primer intento serio frustrado de ir a Inglaterra de Helene: "Confío en que tú y Nora hayáis disfrutado de unas buenas vacaciones. Yo he pasado las mías en Central Park, porque Joey, mi querido dentista, me ha concedido también un mes de descanso (se fue de viaje de luna de miel..., una luna de miel que yo he financiado en gran parte). ¿Te conté que la primavera pasada me dijo que tenía que ponerme fundas en todos mis dientes o arrancármelos? Yo me decidí por las fundas..., porque me he acostumbrado a tener dientes. Pero el importe del arreglo es astronómico. Así que Isabel va a tener que subir al trono sin mí: la única coronación a la que voy a poder asistir en los dos próximos años, me temo que será la de mis dientes".
"¿Tienes el Viaje a América de De Tocqueville? Alguien tomó prestado el mío, y no me lo ha devuelto. ¿Por qué será que personas a las que jamás se les pasaría por la imaginación robar nada encuentran perfectamente lícito robar libros?"
"Cualquier erudito hubiera sabido que la Ródope de Landor era la misma Ródopis que le había sacado hasta el último céntimo al hermano de Safo, pero yo no soy una erudita: me pasé un invierno aprendiéndome estoicamente de memoria las declinaciones griegas, pero ellas solas me abandonaron después".
Es un libro que me ha gustado a pesar de mi desliz respecto a la realidad y la ficción. Supongo que es más emocionante sintiendo que es cierto, que no es un experimento literario. Durante este mes estaremos hablando de él en el Club de Lectura 2.0 por si queréis pasaros por allí y charlar. Además podéis leer los posts de Carmen, Bichejo y Livia (a ver si esta vez sí...).
Pues no pensaba yo que el club de lectura me fuese a proporcionar algo tan bueno como la peli, que vi con ND (no, el libro no lo he leído). También la recomiendo.
ResponderEliminarSon muy parecidos los dos. Me alegro de que hayas sacado algo bueno del club de lectura, aunque sea una película! xDD
ResponderEliminar¡Dios mío!, vais a conseguir que lea. Ahora resulta que tres de los blogs que sigo (Carmen, Degraciaíto y Bichejo) pertenecen al mismo club de lectura y cuando acaban un libro, los tres publican -¡al unísono!- un post sobre el libro. Hoy he hecho el ejercicio de leerme los 3 post y puedo sacar las siguientes conclusiones:
ResponderEliminar1) Cierto, parece que habéis leído el mismo libro, pues vuestras reseñas no difieren mucho entre sí.
2) La imagen de la entrada corresponde en los tres casos a la portada del libro ... peeeeeeero, está claro que a ediciones diferentes. ¿Habrá alguna diferencia?
3) A pesar de coincidir en lo que os ha gustado este libro, cada uno/a de vosotros/as saca diferentes conclusiones. Eso está muy bien.
4) ¿Para qué me voy a leer el libro? on vuestros posts ya tengo suficiente (además, uno de vosotros recomienda ver la película, así que ...)
Si me permitís, pondré el mismo comentario en los 3 blogs
PS ¿Qué me está pasando? Que yo no leo, que yo no leo, que yo no leo, que yo no leo ... ¡¡¡y sigo 3 blogs de un Club de Lectura!!!
Al final caerás, Paterfamilias, y este libro no es una mala manera de caer... En cuanto a lo de las imágenes, en mi caso son las que encuentro por internet para ponerlas. Cojo la que más me gusta.
ResponderEliminarPor cierto, hay otro blog, el de Livia, que también participa en el club de lectura y también habla del libro, que lo sepas!
Veré la peli cualquier día, a ver si me gusta tanto como la obra de teatro, que es como conocí el libro.
ResponderEliminarA mí me encanta, y lo recomiendo siempre.
Paterfamilias, los libros son tus amigos (y los nuestros!!)
Tengo pendiente la película..y el libro me gusto, tampoco me emocionó pero me gustó bastante.
ResponderEliminarND mal no conocer el huevo en polvo...XD
Sí, tengo pendiente lo del huevo en polvo... tienen que salir unas tortillas riquísimas! xDD
ResponderEliminarLa película la tenemos, si quieres que te la grabemos se lo dices a Anniehall.
Este libro me encanta.. no lo puedo remediar! Pero no encuentro la peli por ningún lado :-(
ResponderEliminarPues en Amazon está por 3 euros por si te interesa, Saramaga.
ResponderEliminarSí, he leído las referencias a la película y creo que la voy a bajar y la voy a ver. Me pega todo Anne Bancroft de Helene y Anthony Hopkins de señor Doel. Gracias por la idea.
ResponderEliminar¿No conocías la huevina? Desde hace mucho se toma en restauración, ya no se cocina con huevos si no es en casa.
Hola Bichejo, Carmen, ND y Livia,
ResponderEliminarNo vale con que a uno le guste leer, sin más. Para que te apasione este libro(como creo q a Bichejo, q lo ha recomendado) supongo q tienes q ser un loco de los libros sin conocimiento, de esa gente pelín friki, fetichista, q quiere TENER sus libros, y demás rituales. "Soy di, y soy uno de esos" (es esto un grupo de terapia?), y esta correspondecia toca todas nuestras teclas.
He ido a mis archivos, a ver qué escribí del libro cuando lo leí, y os lo pensaba pegar aquí. Sólo escribí unas citas, q resumen eso perfectamente. Creo q las colgaré maniana en nuestro blog... gracias por la retroalimentación! ;)
muxus
di
Pues yo entiendo ese fetichismo de los libros, pero tengo el handicap de que viejos y amarillentos a mí los libros ya me gustan menos...
ResponderEliminarPásate cuando quieras por la página del club de lectura porque este mes estaremos hablando del libro y de bibliofilia, por supuesto!
Carmen, lo de la huevina pensé que era más como un tetrabrik con el huevo ya batido, no huevo en polvo...
ResponderEliminarMe parece, ND, que la mejor lectura de un libro se hace sin conocer esos datos externos. Normalmente no es posible, porque has oído hablar del autor o has leído algo suyo. Pero cuando es posible la lectura "virginal" es la mejor lectura. Luego te enteras de lo demás y reordenas tus percepciones.
ResponderEliminarEn cuanto a lo de las deudas, totalmente de acuerdo: los bancos que jugaron a dar créditos insolventes y se endeudaron con bancos alemanes, que paguen las deudas o cierren, y dejen con el culo al aire a los bancos extranjeros que aceptaron endeudarse. ¡Pero que las paguen ellos!, no nosotros por la socialización de las pérdidas por parte del Estado (uséase, nosotros, que no nos endeudamos tanto, ahora debemos pagarlo, no lo soporto más... que cantaba el bolero.
NáN, yo eso de socializar deudas no lo veo claro en absoluto. Sí que veo claro que hay que pagar lo que se debe, pero el que lo debe.
ResponderEliminarEs para cabrearse y mucho!
Respecto a lo del libro, coincido contigo en general, casi nunca me leo los prólogos o las introducciones, pero creo que el saber que la historia es real o no lo es sí puede ser un factor importante.
A mi me gustó tanto que a la primera oportunidad que tuve fui al 84 de Charing y nada...no queda nada.
ResponderEliminarUna pena, ya cuando fue la autora la librería estaba cerrada.
ResponderEliminarNo, no, yo creo que hiciste muy bien en leer el libro así, sin saber lo que había detrás ¿no ha sido después una sorpresa agradable?
ResponderEliminarY sobre todo eso, una sorpesa, cuando la mitad de lo que se lee hoy en día, nos suena a ya visto.
Yo vi hace unos años un montaje teatral basado en estas cartas, y me parece que le restaba un poco de simpatía al personaje de la escritora, que más que una "adorable excéntrica" llegaba a parecer un poco talibán de los libros.
Pues mira, me leo (por fin) el libro, que también he visto la película y a este paso veré el musical antes del texto inicial.
Por cierto ¿sabes que este es el libro "santo patrón" de los blogueros? Describe un poco lo que nos ocurre: Empezamos a hablar de un interés común, y nos terminamos haciendo amigos.
La moraleja es que hay que intentar hacer ese viaje soñado en cuánto se pueda, para que no nos ocurra como a H.H. que cuando fue a Londres descubrió que efectivamente (tal y como dice pseudosocióloga) "no quedaba nada".