¿Vacaciones?


Pues ya estamos con el lío de todos los años, pero este año agravado por la falta de personal (y menos que vamos a ser dentro de nada...). El año pasado me tuve que llevar trabajo a cuestas y terminar unos documentos y responder correos durante mis vacaciones en Oporto. Es algo que fastidia bastante, pero cuando tú eres el único que sabe de eso o eres el responsable de un proyecto o una tarea, pues a veces toca fastidiarse y no desconectar totalmente. Y tampoco está el horno para bollos y decir que en vacaciones trabaje su p... madre, aunque ganas te dan de decirlo.

El caso es que ayer tuve una conversación con mi jefe en la que él termina abstrayéndose de la realidad. La niega y parece que así se van a resolver los problemas. La conversación fue algo así:

-Hay que ir a Orense el día 31 a medir.
-Yo no puedo, estoy de vacaciones.
-Pues hay que ir a medir.
-Pues no puedo.
-Pues hay que poder porque vivimos de eso.
-No puedo porque esa semana estoy solo con los niños y a partir del 31 la señora que los cuida se va de vacaciones.
-Pues hay que poder.
-¿Y qué quieres que haga?, ¿que me lleve a los niños a trabajar a la vía conmigo?
-Hay que ir.
-Yo no puedo.
-Es que si no nos van a echar.
-Si entiendo que hay que ir, pero te vuelvo a repetir que yo no puedo, que no tengo con quién dejar a mis hijos.
-Pues yo el año pasado me quedé sin vacaciones (totalmente falso, tuvo casi dos meses...).
-Pero es que tu mujer no trabaja y puede ser un fastidio, pero yo te estoy diciendo que ese día no puedo y que tengo las vacaciones aprobadas por ti.
-Pues hay que ir.
-Pues diles que cambien la fecha.
-No puede ser.
-¿Se lo has preguntado?
-No, pero no puede ser.
-Y ¿si en vez de vacaciones estuviera de viaje o comprometido con otro proyecto? ¿También tendría que ir?
-Ese es otro caso.
-Sí, pero ¿tendría que ir? ¿y si los equipos los estuviéramos usando para otro proyecto?
-Hay que ir.
-Si no te digo que no, si lo entiendo. Solo te digo que yo no puedo.
-Pues tú verás.
-Habla a ver si se puede cambiar la fecha.
-No se va a poder.

Diez minutos después:

-He mandado un correo diciendo que se cambien las medidas para el día anterior.

Otros diez minutos después:

-Han aceptado el cambio de fecha.

Resultado: Me quedo sin dos días de vacaciones, me toca trabajar la noche del 30 de julio, pero tengo a alguien que puede quedarse con los niños... Seguiremos informando.

Comentarios

  1. Prefiero no comentar, hay algún simbolito para echar humo por las orejas? Pues eso.

    ResponderEliminar
  2. De los años que estuve en el circo sólo no cambié las vacaciones el año pasado y porque me tuve que negar en rotundo. Unas veces por necesidad y otras por quedar bien, el caso es que no se valoran como deberían.
    Suerte y que no haya más sorpresas.

    ResponderEliminar
  3. Un payaso es ese tío!!!! (con mis respetos a esta honrosa y difícil profesión, of course!!!). Perdiendo el tiempo y pasándote el marrón. Claaaro, debe estar acostumbrado a que le digan que sí de entrada...así se despreocupa del tema al inicio.
    Ni te cuento el chou de la última semana de junio, que cogí vacaciones (la única semana que vamos a coincidir toda la família junta este verano...no te digo más). Pues parece ser que se acababa el mundo, mira!!!! No paré a correos y llamadas....maldita BB!!!!!!!! Y, al final, nunca llega del todo la sangre al rio...y las cosas pueden esperar...y, encima, no puedes quejarte....Un asco todo.

    ResponderEliminar
  4. Así también soy jefa yo. Cuando haya un problema, en vez de buscar soluciones, digo que "hay que hacerlo" y la peña que arree. ¡Ah! ¡Espera! Si el 99% de los jefes que he tenido es lo que hacen. Ayyyyy, qué paciencia madre mía, qué paciencia! ;P

    ResponderEliminar
  5. Pues no comentes, Annie, pero de momento es lo que hay...

    Eliahh, tú sabes de lo que hablo de primera mano!

    Xeia y Speedy. El problema es que mi jefe no sabe ser jefe. Por eso estamos como estamos, a punto de echar el cierre.

    ResponderEliminar
  6. ¿No has pensado en coger frío en la espalda y que te de un lumbago justo el día antes? En esta época los aires acondicionados son muy dañinos.

    ResponderEliminar
  7. Eso me recuerda la vez que mi jefe se pilló lumbago y dijo que lo pilló en un viaje al que fui yo en su lugar. Claro, que fui yo en su lugar porque según él a su hijo lo estaban metiendo en diálisis, cosa que también era mentira...

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estaba a puntico de comentar justo eso del viaje a Copenhague!!!

      Eliminar

Publicar un comentario

Entradas populares